Ninguna cantidad de preparación puede hacer que vivir la muerte de los padres sea más fácil, incluso si han vivido una vida larga y plena.
Después de la conmoción inicial, hay toda una serie de detalles logísticos que deben ser resueltos: finanzas, arreglos funerarios, ayudar a tu padre o madre sobreviviente a decidir qué hacer a continuación.
Puedes estar estresado por tomar demasiado tiempo libre del trabajo y preocupado acerca de cómo sus hijos adolescentes manejarán la pérdida de un abuelo. Y se espera que usted navegue por todos estos desafíos y más mientras trata de ponerle una cara valiente a su familia, aunque usted también esté sufriendo.
Aunque es un tema difícil de considerar, la muerte de los padres es una realidad dolorosa para muchas personas.
Sin embargo, hay algunas maneras de hacer esta transición un poco más fácil para todos. Aquí hay 9 consejos para sobrellevar la muerte de los padres.
Sea comprensivo con la muerte de los padres
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Cada persona procesa el duelo y la pérdida de manera diferente. Tenga eso en cuenta cuando se trata de su padre o madre sobreviviente, sus hijos adolescentes y los demás miembros de su familia.
Algunos pueden preferir mantenerse ocupados y afligirse en privado, mientras que otros pueden enmascarar su dolor tratando de hacer reír a otros. Sólo porque alguien no es visiblemente emocional no significa que no esté sufriendo a su propia manera.
Date un respiro
Recuerde, usted no tiene que asumir todas las tareas inmediatamente después de la muerte de los padres. Si la idea de revisar las pertenencias de mamá es demasiado dolorosa en este momento, dése permiso para respirar.
Considere la posibilidad de solicitar la ayuda para que recoja las pertenencias más preciadas de sus padres y las guarde en una bóveda privada. Cuando estés emocionalmente preparado y tengas tiempo para dedicarte a la tarea de revisar esos valiosos recuerdos.
Organícese
Aunque puede parecer tabú estar preocupado por el dinero durante un momento tan difícil, la realidad es que usted va a tener muchas facturas y documentos financieros importantes de los que hacer un seguimiento después de la muerte de un ser querido.
Considere la posibilidad de crear un espacio en su casa dedicado a tratar asuntos financieros y legales; no deje un montón de papeleo en la mesa del comedor. Invierta en una carpeta o en un organizador de papel estilo acordeón para que nunca tenga que buscar desesperadamente papeleo.
No te olvides de cuidarte.
Usted puede estar ocupado cuidando los detalles logísticos o poniendo una cara feliz a otros miembros de la familia, pero recuerde que también debe cuidarse a sí mismo. La pena es una emoción agotadora, física y mentalmente, así que reserve unas horas para hacer lo que le hace feliz.
Dé un paseo, trabaje en un proyecto apasionante en el garaje o escuche su lista de reproducción favorita.
Considere la posibilidad de hablar con un profesional
Y ya que estamos con el tema de los cuidados personales, reconozca que está bien visitar a un consejero si tiene problemas para procesar la muerte de los padres. Un terapeuta puede ayudarle a desarrollar estrategias para lidiar con su pena y tristeza, ser capaz de contar tu historia en un lugar neutral y sin juicios es una de las maneras más rápidas y constructivas de volver a tu vida.
Si nunca ha visitado a un profesional de la salud mental o es escéptico sobre el proceso, considere el ejemplo que está dando a sus hijos que pronto serán adultos jóvenes.
Demuéstreles que está bien pedir ayuda y hablar sobre sus sentimientos; usted demostrará la importancia de contar con mecanismos saludables para sobrellevar la situación.
No se sorprenda por sentimientos inesperados
Si su padre o madre sufrió una larga enfermedad o alcanzó una edad impresionante, usted probablemente consideró la posibilidad de muerte durante varios meses o años.
Pero sólo porque tu cerebro entienda que la vida está llegando a su fin no significa que tu corazón necesariamente seguirá el ritmo. Usted puede sentir un torrente de emociones inesperadas.
La gente puede asumir la muerte de los padres ancianos es algo que se espera, por lo tanto, disminuye el golpe, sin embargo, la edad de tus padres cuando fallecen no cambia nada sobre la gravedad y el dolor de la pérdida.
Tu relación con tus padres era y es única, y también lo es tu experiencia de su muerte, y eso está bien.
Del mismo modo, si usted ha sido el principal cuidador de su mamá o papá, puede sentir una mezcla de emociones, incluyendo alivio, después de su muerte. Eso está bien, también.
Sentirse así no significa que uno sea una mala persona… significa que uno es humano
El dolor no puede reducirse a un sentimiento, así que trata de no culparte por los reflujos y flujos que experimentarás después de la muerte de los padres.
Ofrezca apoyo a su padre o madre sobreviviente
Después de la muerte de los padres, usted atenderá instintivamente las necesidades emocionales de su padre o madre sobreviviente.
Pero también puede haber algunos asuntos logísticos que considerar. La mayoría de los adultos con un padre mayor de 65 años ayudan con sus asuntos y cuidados, reconozca que su padre o madre sobreviviente está entrando en una nueva etapa de la vida y discuta esa idea con él o ella: ¿desea que un proveedor de cuidado se pase por aquí cada semana? ¿Quién los llevará a las citas y a la tienda de comestibles? ¿Cómo piensan pasar su tiempo ahora?
Aceptar la ayuda y pedirla
Después de la muerte de los padres, usted puede encontrarse haciendo malabares con un plato lleno en el trabajo y docenas de otras tareas.
Pero recuerda: No tienes que hacerlo todo solo. Si alguien se ofrece a cortar el césped o a enviar una comida preparada para su familia, acepte su ayuda amablemente.
No dude en pedir ayuda, y si sus amigos y familiares le ofrecen su apoyo, acéptelo, delegue algunas de las muchas tareas a las que se enfrenta ahora.
Le ayudará a hacer las cosas y permitirá que amigos y familiares expresen lo mucho que les importa a través de sus acciones.
Del mismo modo, aunque le parezca conveniente ofrecer su casa para una recepción o para ayudar a hacer los arreglos de viaje para los huéspedes de fuera de la ciudad, recuerde que esto no tiene que ser su responsabilidad.
Las funerarias a menudo pueden ayudar con vuelos, hoteles y otros detalles, como organizar una recepción en un restaurante local o en sus instalaciones.
Suelta los sentimientos
Cuando un ser querido muere, es fácil repetir cada pelea o desacuerdo que usted tuvo y preguntarse qué podría haber dicho de otra manera.
Usted puede cuestionar las decisiones que tomó, como mudar a su padre o madre de edad avanzada a una institución de vivienda asistida.
Pero ser duro consigo mismo después del hecho no es productivo ni útil para el proceso de curación, trate de ser amable consigo mismo durante este tiempo, sepa que usted hizo lo mejor que pudo en ese momento con la información y los recursos a su alcance.
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